Ya ha pasado un año y estamos ansiosos por ver qué nos trae esta vez nuestro candidato favorito a la presidencia, Frank Underwood (Kevin Spacey) junto a su esposa Claire (Robin Wright). El común de los mortales tiene que esperar su estreno en Netflix para poder ver la cuarta temporada de House of Cards, pero nosotros tuvimos el honor de presenciarla antes que todos en un screening del primer capítulo.
La desobediencia de la Primera Dama
Por primera vez en la serie, a raíz de los hechos ocurridos en la temporada anterior, Frank y Claire tienen un objetivo distinto y no lucharán por uno en conjunto. Esta vez veremos a Frank obsesionado con ganar su reelección presidencial, dado que llegó a encabezar la Casa Blanca haciendo un reemplazo. Lo que él realmente quiere es ganarse a la gente bajo sus reglas y no por haber sido vicepresidente; sin embargo, como es usual, no le será fácil lograr su objetivo, siempre surgen pequeños problemas que si no los trata de inmediato se le podrían salir de las manos. Ahora, uno de ellos es su querida esposa Claire.
En la temporada anterior vimos que la Primera Dama tomó una decisión muy importante: abandonar al poderoso Frank Underwood, justo en medio de su campaña y antes de presentar un discurso relevante para ganar votos, por lo que en este primer episodio vemos a una Claire empoderada y bien decidida en llevar su propia campaña sin ayuda o intervención de Frank. Claire decide volver a sus raíces pero evidentemente, no quiso volver a casa para encontrarse con su pueblo, llega a Texas con el fin de generar tratos que la lleven a ser representante de su ciudad natal en el congreso. El problema es que no todo le saldrá como ella desea y se encontrará con una noticia que realmente la impactará. Veremos a una figura muy clave en la vida de Claire, que sin duda será muy relevante en la historia a medida que pasan los capítulos, pero no la mencionaré para no arruinarles la sorpresa.
Claramente el hecho de que su esposa lo abandonara, no deja tranquilo a Frank. La desaparición de Claire significa el surgimiento de un montón de rumores por parte de la prensa, que como siempre afecta su campaña electoral. Dado estos sucesos, comienza a localizarla al clásico y turbio estilo Underwood, comandando la tarea a su mano derecha Doug Stamper hasta que da con su paradero. Luego de un rato, veremos el primer enfrentamiento de los Underwood luego de su separación.
A diferencia de la tercera temporada, la cual basaba su trama en la experiencia de Frank como presidente ante el conflicto con Rusia, esta última deja de lado sus eventos como cabecilla de Estados Unidos y viene con una gran carga de emociones y experiencias más personales de los protagonistas. Asimismo, se encargará de desarrollar hechos inconclusos en las temporadas pasadas, con el resurgimiento de un personaje que estaba algo abandonado anteriormente, el cual de seguro nos dará una gran sorpresa, sobretodo para el gran señor Underwood.
Lo que nunca puede faltar: Las notables frases de Frank
Lo bueno de este primer capítulo, en el que no suceden tantas cosas pero sí da la patada inicial a un montón de problemas, es que tiene tomas, un guión y diálogos que nos recuerda porqué nos gustó tanto la serie cuando comenzamos a verla, sobre todo con tanta frase de oro que lanza nuestro Frank, que no podría hacernos tanta gracia si no fuera interpretado por el grandísimo Kevin Spacey.
Así que ahora solo queda sentarnos todo el fin de semana a ver todos los capítulos de esta nueva temporada. Pero cuando la terminemos y quedemos con esa depresión post término de serie/temporada, no debemos desesperarnos, ya que tendremos House of Cards para rato con su confirmación de una quinta temporada. Solo esperemos que ésta nos sorprenda tanto como siempre y nos deje deseando que pase el año lo más rápido posible solo para ver a la gran pareja Underwood.
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