El Internet de las Cosas o siemplemente llamado IoT tiene variables y aplicaciones realmente grandes. No obstante, un grupo de expertos lo está fusionando con las capacidades de unos insectos: los abejorros.
Si bien un campo se puede monitorear con drones o sensores, hacerlo a pequeña escala puede ser algo engorroso. Con la idea de obtener datos certeros e instantáneos, un equipo de ingenieros de la Universidad de Washington, encabezados por Shyam Gollakotta, equipó a los abejorros con un mini circuito con sensores que se conectan y cargan de forma inalámbrica.
¿Para que? Una colmena llena de estas “abejas cibernéticas” podría ayudar a monitorear la salud de un campo al verificar la temperatura y la humedad, así como a observar signos de estrés en los cultivos, entre otra información.
La forma de hacerlo es mediante un sistema llamado “Living IoT” el cual se monta en su espalda. En este punto, seguramente te estarás preguntando si es un método cruel para estos pequeños insectos. Según dicen los ingenieros, se asesoraron con biólogos y emplean los “mejores métodos de cuidado y manejo”.
Los mismos hablaron con TechCrunch y explicaron que el chip que emplea sensores y una mini batería pesa solo 102 miligramos y que un abejorro adulto, podría pesar de dos a seis veces más. Así mismo, estos insectos pueden transportar tres cuartas partes de su peso corporal en polen y néctar cuando regresan a la colmena. Así lo explicó Gollakotta:
Decidimos usar abejorros porque son lo suficientemente grandes como para llevar una pequeña batería que puede alimentar nuestro sistema, y regresan a una colmena todas las noches donde podemos recargar las baterías de forma inalámbrica.
El grupo puede monitorear a los abejorros en un rango de 80 metros, lo suficiente para estudiar la colmena pero, evidentemente abre muchas posibilidades más. Siniestro o no, el IoT empleando formas vivas ya es un hecho.
Comentarios recientes